Panamá, 8 de octubre de 2025. Durante el año fiscal 2025, el Canal de Panamá alcanzó un total de 13,404 tránsitos, lo que representa un incremento del 19.3% en comparación con el mismo período del año anterior, cuando se registraron 11,240 tránsitos. Este aumento refleja una recuperación significativa del flujo de buques, pese a los desafíos derivados de las condiciones climáticas y del mercado global.
Del total de tránsitos, 3,342 correspondieron a buques neopanamax y 10,062 a buques panamax, evidenciando la importancia de ambas esclusas para la conectividad marítima mundial.
En términos financieros, el Canal cerró el año con una ganancia neta de B/.4,134 millones, superando en B/.372 millones lo proyectado en el presupuesto y registrando un crecimiento de B/.695 millones frente al año fiscal 2024.
Este desempeño reafirma la solidez operativa y económica del Canal de Panamá, consolidando su papel estratégico en el comercio internacional y su aporte sostenido a la economía nacional.
Los ingresos totales mostraron un desempeño superior a las expectativas, alcanzando B/.5,705 millones de balboas, aproximadamente 14,4% por encima de los B/.4,986 millones del año fiscal (AF) 2024.
Entre los principales impulsores del crecimiento destacaron los segmentos de contenedores y gas licuado de petróleo (LPG), que mostraron un desempeño favorable durante el año.
Por su parte, el segmento de graneleros continuó su proceso de recuperación, mientras que el de gas natural licuado (LNG) registró resultados por debajo de lo esperado, debido principalmente a los costos de flete en el mercado internacional.
Los ingresos también se beneficiaron de factores extraordinarios como el “frontloading” (distribución anticipada), que aportó al menos B/. 100 millones de balboas a los resultados del AF 2025, así como de los resultados del programa de asignación de cupos a largo plazo (LoTSA), que ayudó a compensar parcialmente el impacto de la disminución del tránsito de buques LNG.
Con estos resultados, el Canal de Panamá se mantiene financieramente sólido y estratégicamente preparado para afrontar las inversiones que comenzarán a ejecutarse a partir de 2026, orientadas a fortalecer la capacidad hídrica y la competitividad de la vía interoceánica.